¿Las contradicciones de Avianca o una aerolínea en decadencia?
- Elkin Pelaez

- 18 jul
- 2 Min. de lectura
La última aerolinea en la linea de preferencias en vuelos.

Lo que alguna vez fue la aerolínea más famosa y reconocida de Colombia, ahora se encuentra atrapada en decisiones que resultan totalmente contradictorias. En mayo de 2025, Avianca celebraba orgullosamente nuevos servicios, destacando su compromiso con la conectividad y el servicio al pasajero. Sin embargo, apenas dos meses después, la compañía anunció la suspensión de su ruta Bogotá–La Habana, demostrando que su estrategia se ha vuelto errática y desconcertante para los viajeros.
El 12 de mayo de 2025, Avianca publicó un comunicado difundido en su web corporativa, con un tono triunfante y propositivo sobre el crecimiento de operaciones. En contraste, se vio obligada a cancelar la ruta Bogotá–La Habana a partir del 30 de agosto de 2025, citando “monitoreo constante de la red” y redistribución de recursos . Esa misma línea comunicativa tan positiva se contradecía con la realidad: recorte de rutas y reducción de servicio que cae en picada.

Ante esto, muchos usuarios sienten que están siendo víctimas de una incoherencia corporativa: una aerolínea que anuncia expansión mientras reduce drásticamente la oferta. La suspensión de rutas, incluso en vuelos intercontinentales, afecta la percepción de confianza.
El hecho de que ya ni siquiera se ofrezca agua en vuelos largos, una crítica común entre los pasajeros frecuentes, evidencia que el servicio premium se ha degradado considerablemente, y ya no corresponde al estatus histórico de Avianca.
En el mercado colombiano, Avianca ya no es la primera opción, sino la última. Los colombianos acostumbrados antes a elegirla como referencia, ahora la evitan al mínimo detalle: el mal servicio, las cancelaciones repentinas y la falta de atención básica han llevado a que, incluso en rutas largas, sea la alternativa marginal. Latinoamérica entera ha visto cómo aerolíneas competidoras como Wingo (especialmente en ruta a Cuba) ganan terreno al ofrecer seguridad y previsibilidad donde Avianca flaquea.
¿Cómo llegó Avianca a esta crítica en su reputación? El exceso de contradicciones —expansión vs. recortes, promesas vs. realidades, servicio versus austeridad— refleja una estrategia errática o falta de visión clara. En lugar de liderar con fortaleza, parece actuar a salto de solo reacción. Hoy, la aerolínea más querida del país se ha convertido en la última alternativa, y el vuelo con ella es una apuesta riesgosa para muchos. A menos que recupere coherencia y servicio, su reputación ya parece un vuelo en picada sin redención a la vista.
Viaja.
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